Si hay una noción sobre la que descansa gran parte de la tradición de pensamiento occidental es precisamente la noción de libertad. Libros completos, discusiones históricas, mares de tinta y una gran parte de la producción narrativa y audiovisual se ha dedicado a la idea de libertad. Esa palabra ha formado parte de reclamos, de frases históricas, de lemas y proclamas que han acompañado guerras y movimientos. Este concepto ha sido utilizado como anhelo de luchas revolucionarias para la liberación de naciones, pero también su uso está unido a la defensa del individualismo a ultranza, como cuando se defiende la propiedad privada o la libertad de mercado en un mundo capitalista. La libertad individual o la libertad de naciones o entidades colectivas hace que esa misma noción se use para fines diferentes, para defender ideas incluso antagónicas. ¿Ser libres de qué o con respecto de quiénes? Defender la libertad de los individuos como si esta libertad no estuviera enmarcada en las relaciones colectivas que establecemos ha sido un ejercicio propio de quienes sostienen una visión neoliberal de la vida. Con base en la palabra libertad se han creado movimientos liberales y movimientos libertarios que defienden la libertad capitalista.
¿Es posible tener un acercamiento distinto a una categoría que ha sido visitada tantas veces y desde ángulos tan distintos? Las mujeres indígenas de diferentes naciones nos responden contundentemente que sí. En las creaciones y textos correspondientes a esta semilla, la palabra libertad se ilumina con diferentes luces. Un hecho que llama la atención es que, en muchos de los acercamientos, la libertad se enmarca siempre desde un anhelo colectivo, de la libertad planteada como un deseo para nuestros pueblos, libertad enmarcada como deseos de autonomía, de libertad para decidir sobre nuestros territorios. En otros acercamientos, se plantean preguntas sobre la libertad de las mujeres indígenas dentro de las comunidades a las que pertenecemos, de la libertad en el marco de la diversidad sexual, de la libertad de elegir nuestros nombres y nuestro género, de la libertad económica y de los deseos para el futuro. Con estas creaciones y textos es posible entonces rescatar la noción de libertad del secuestro individualista que ha sufrido, liberar la libertad de sus ataduras capitalistas. Estos acercamientos dejan en claro que la libertad individual y la colectiva no se oponen, sino que dependen una de la otra, que la libertad debería ser, siempre, un anhelo compartido.
Pueblo kumiai
La libertad de mi pueblo vive manteniendo la memoria y enseñanzas de nuestros antepasados.
Pueblo nahua
Cuando se habla de la libertad de las comunidades indígenas, usualmente se hace referencia a la libre determinación, a la autonomía, pero en este texto me gustaría hablar de la libertad que tiene que ver con las personas que conforman esas comunidades.
Pueblo chinanteco
Lagɨ ron ngen ‘yu, takón hman
le he hnan’ chi hnean konla hnean che kyu thíu’an.
Siempre en verano, todos los días
se ve hermoso el patio de mi abuela.
Pueblo wixárika
Esta creación expresa la libertad y la espiritualidad de nosotras las mujeres wixáritari de poder trasmitir nuestra lengua, de ser libres de usar nuestra vestimenta y seguir conservando nuestras costumbres y tradiciones.
Pueblo zapoteco
Como muchos conceptos, “libertad” fue una de esas palabras que encontré desde niña en el diccionario sin mucho significado concreto para mi vida.
Pueblo triqui
Yo soy de la nación triqui baja, específicamente en San Juan Copala, Juxtlahuaca, Oaxaca. Las mujeres de esta nación consideramos que nuestra libertad como pueblo implica una lucha permanente por la vida.
Pueblo ch’ol
Tyi ityojlel alä matye’el yik’oty ñuki matye’lum, cha’ wä’añ, la kty’añ
tsäts che bajche’ ityomel k’olok’ añixbä iwi’,
wäle woli kloty jiñi ñatyayaj icha’añ xchämeño’bä wajali.
Entre las montañas y selvas, de nuevo, nuestra voz,
firme como el tronco del roble enraizado,
hoy recojo los recuerdos de los muertos de ese tiempo.
Pueblo tlahuica / pjiekakjo
A lo largo de la historia, la cultura tlahuica-pjiekakjo ha recibido distintos nombres como ocuilteco, aztinca, tlahuica o pjiekakjo.
Pueblo matlatzinca
¡Hablar de libertad! ¿Cómo? No recuerdo o no hay manera de asociar este concepto a otra palabra específica en idioma matlatzinca.
Pueblo oluteca
Mi pueblo se llama Villa Oluta, la tierra de Malinalli, mejor conocida como “La Malinche”, una mujer fuerte, quien fue compañera, intérprete y consejera de Hernán Cortés.