Tosenyot
Por Sitalin Sánchez
Tosenyot, así le decían nuestros ancestros. Significa nuestra unidad esencial. Nuestro vínculo inquebrantable como pueblo maseual. Con nuestras contradicciones, tensiones, alegrías y amores, somos una comunidad que sobrevive al tiempo, a la naturaleza y a sus opresores, como dice un poeta sanmigueleño.
La democracia no es otra cosa que el servicio que ofrecemos a la comunidad para vivificarla; es un servicio que se refleja en el tejido de la flor, en echar tortillas, en aventar cuetes, que se vive en la mano vuelta, en la faena y las asambleas, así como junto al fogón, entre la siembra y en el manantial, se trata de un servicio en el que los abuelos son vitales por su experiencia, los niños por sus energías, los animales por compartirnos su vida y las plantas por darnos sustento.
Nuestra democracia no se basa en títulos académicos, en ganancias económicas o en prestigio en medios de comunicación. Nuestra democracia exige un compromiso profundo con nuestra cultura, en nuestra democracia no se hace la promesa vacía de “voy a hacer y ser” sino, “por gratuidad, ya he hecho y he sido mayordomo, danzante, presidente de comité, regidor, músico, teniente”.
Texto basado en los diálogos y conocimientos de Elíseo Zamora y Francisco Sánchez.
Retrato de la autora: Sandra Bagatella
1 comentarios
Reply
Me interesa contactarte.
Nohquia ni mexcatlahtohquetl.